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Albert Pozo - Lleida - 22/06/2017
AFLORAMIENTO
Origen: Inglés
Los orígenes de los Basset hound se encuentran revestidos de leyendas y misticismos, lo que sucede con la mayor parte de las razas caninas, si bien esta raza tal como la conocemos actualmente se desarrolló en Inglaterra durante la segunda mitad del siglo XIX, a partir de los sabuesos (sabuesos) De talla baja procedentes de Francia. Sus orígenes vienen determinados por su uso para la caza y para un tamaño reducido. La primera referencia histórica moderna documentada de la palabra Afloramiento para un determinado tipo de perro, la encontramos en un tratado titulado el Venerie, Escrito por Jacques du Fouilloux, publicado el 1562. Las razas Basset eran especialmente útiles gracias a sus reducidas dimensiones, ya que los perros podían ser acompañados fácilmente a pie por los cazadores que cazaban conejo y liebre.
El origen del Basset hound moderno se remonta a tiempos más próximos, cuando en Inglaterra se hicieron cruces de perros Basset a partir de ejemplares Basset Artesien Normand, largos y bajos, con ejemplares de Bloodhound, que acabó originando una raza de alta sustancia y una expresión singular, heredada en gran parte del Bloodhound y con unas características únicas como perro de rastro. En 1866, lord Galway adquirió una pareja de Basset Artesien Normand por cuenta de Tournon, y una camada de esta pareja fue vendida a lord Onslow, quienes cruzó con razas inglesas, fundamentalmente con Beagles y Bloodhounds.
En 1883 los amantes de la raza, los franceses anteriormente mencionados, fundaron el Club del Perro de afloramiento, Lo que favoreció que en la exposición canina celebrada en 1886 en el Aquarium de Londres participaran 120 ejemplares de esta raza. Un año más tarde, George Krehel redacta el primer estándar, que se mantuvo en vigor durante 60 años en algunos aspectos, como la cabeza y su piel suelta. Con la Primera Guerra Mundial desapareció el Club del Basset hound, y en la Segunda Guerra Mundial se redujo aún más la cría de esta raza.
Sin embargo, en 1954 se creó un nuevo Club del Basset hound, que supuso un nuevo impulso para la raza, al pasar de 12 inscripciones registradas en el Kennel Club en 1950 a 1.687 en 1965. En España, no se empezaron a ver ejemplares de Basset hound hasta la década de los años setenta, con la importación de algunos ejemplares de Inglaterra, ya finales de esa década y comienzos de los años ochenta, comienzan a surgir los primeros criadores nacionales dedicados a esta raza , con afijos como Los Madroñales o La Fragata. La década de los noventa es la edad dorada de los Basset hound en España, ya que aparecen un buen número de criadores que constituyen un germen de la creación del Club Español del Basset hound de 1995.
es un sabueso de patas cortas, cuerpo alargado, orejas largas, bien balanceado y con innumerables cualidades, siendo la más destacable su gran olfato. Es un perro de trabajo, por lo tanto debe ser fuerte, activo y tener gran resistencia en el campo, con tenacidad de antiguo linaje, que caza venteando la presa y posee el instinto de equipo. Su voz es profunda y melodiosa, y se usa para la caza con escopeta de conejo, liebre y zorro.
(Fuente: Perro Club Español del Basset)
