Prensa Gencat - Lleida - 02/26/2018
El Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación (DARP) de la Generalidad de Cataluña ha presentado hoy al sector la propuesta del Plan piloto de prevención y mitigación de los daños producidos por el conejo en la comarca del Segrià, a lo largo de una encuentro celebrado en su sede en Lleida, en el que también se ha acordado crear la comisión técnica de seguimiento, aparte de abordar el resultado de los censos de conejo, y la valoración de declaración de Emergencia cinegética, entre otros. De hecho, la citada Comisión ha decidido aprobar la declaración de Emergencia Cinegética tras la presentación de los resultados de los censos invernales de conejos realizados este febrero; y en un mes aproximadamente se reunirá de nuevo para efectuar el seguimiento de la Declaración.
El Plan piloto se enmarca en el Plan de Prevención de Daños impulsado por el DARP. Se trata de una serie de medidas y acciones que se están llevando a cabo para establecer un nuevo marco legal, administrativo y operativo, a fin de hacer frente a los nuevos retos que generan los elevados niveles poblacionales que han alcanzado diversas especies cinegéticas. Así, el objetivo es prevenir y controlar de forma eficiente y sostenible los riesgos y los daños que generan. El desarrollo de planes piloto de prevención y mitigación de los daños en comarcas con problemáticas específicas, como la del conejo en el Segrià, es básico para poder equilibrar determinadas poblaciones de fauna cinegética.
En esta línea, el director de los Servicios Territoriales del Departamento en Lleida, Ferran de Noguera, ha subrayado que “los objetivos generales del Plan son controlar la población de conejo hasta unos niveles aceptables de daños agrícolas, concienciar y motivar a todos los sectores implicados en el control de los daños, y definir medidas, adicionales a las cinegéticas, en ese control”; y ha explicado que este Plan piloto correspondiente al Segrià afecta a más de 6.000 hectáreas de los municipios de Torrefarrera, Alpicat, Rosselló, Lleida, Almacelles y Alguaire, “una zona de la llanura eminentemente agrícola, de regadío tradicional y topografía suave, con orientaciones predominantemente de solei y llanuras, muy favorable a la ubicación de las madrigueras de conejo de bosque”.
Otras medidas que se han tomado hasta ahora han sido, principalmente, de dos tipos: las primeras de cariz cinegético, por tanto de los cazadores, encaminadas a disminuir la densidad de la población de conejo; y las segundas, por parte de los agricultores, implementando medidas de protección de los cultivos, como la colocación de protectores en los frutales. Se ha constatado que las medidas tomadas no son suficientes y que los daños persisten, por lo que, además de continuar con actuaciones directas de caza durante la temporada hábil y mediante autorizaciones excepcionales por daños durante la época de veda, se propone un seguido de otras actuaciones, entre las que destacan las siguientes:
- localizar y cartografiar detalladamente los principales focos con abundancia de madrigueras (zonas de alta conflictividad), a fin de dirigir e intensificar las actuaciones sobre estas áreas;
- en estas zonas, intensificar las capturas todo el año;
- en estas zonas de alta conflictividad, realizar desbroces de matorral, eliminar acumulaciones de piedras, ramas y otros factores que puedan suponer un efecto refugio para el conejo. Estas actuaciones se deben intensificar, además, en la gran cantidad de infraestructuras viarias que generan un efecto refugio hacia las poblaciones de conejo de monte:
- actuaciones sistemáticas e intensivas de caza nocturna con vehículo, foco y arma de fuego, por parte del Cuerpo de Agentes Rurales, con la participación de cazadores y de los propietarios afectados por los daños;
- establecer un código de buenas prácticas agrícolas para la prevención de los daños;
- y estudiar y fomentar actuaciones y / o métodos de autoprotección de los cultivos.
Por otra parte, en cuanto a la abundancia y evolución de las poblaciones objeto de control, cabe decir que, desde el año 2013, la población de conejo en la zona de aplicación del Plan piloto supera el umbral de los 50 individuos/ kilómetro cuadrado, como densidad media de los tres censos anuales: Desde 2009 las poblaciones de conejo se han multiplicado, a su vez se ha multiplicado las autorizaciones excepcionales de control, hasta el punto de que se autoriza a cazar todo el año. Sin embargo, no se ha alcanzado el objetivo, y la densidad de conejo en la zona del plan piloto no merma.
Por ahora, en este ámbito de actuación, la respuesta del titular se ha visto claramente superada por la sobreabundancia de conejo de bosque en forma de núcleos coloniales hasta unos niveles de alerta que han derivado en episodios de declaración de situación de Emergencia Cinegética por los daños que están causando en la zona.
Por otra parte, la Comisión técnica de Seguimiento del Plan Piloto cuenta con representación de todos los sectores implicados: representantes del DARP, de otros Departamentos y administraciones, así como también representantes territoriales de los cazadores, y miembros de las organizaciones y gestores agrarios.